Qué es y cómo funciona el sistema de admisión de aire

Como bien sabemos, el motor realiza diferentes procesos para poder llevar a cabo la combustión, y uno de ellos tiene que ver con la entrada de aire que regula el sistema de admisión de nuestro vehículo.

Recordemos que, entre mayor cantidad de carburante se necesite quemar, más aire se va a requerir para lograrlo, por eso es importante mantener en perfecto estado cada uno de los componentes de dicho sistema.

Con esto, podríamos decir que el sistema de admisión es el que le permite respirar al coche, pues sus elementos se encargan de darle aire limpio al motor, a la velocidad y temperatura ideal según el régimen de revoluciones al que trabaje.

El sistema de admisión es uno de los mecanismos que más evolución ha tenido a lo largo de los años, en primera instancia, para conseguir el cumplimiento de las diferentes normativas de emisiones contaminantes, y en segunda, para poder ofrecer una mejor eficiencia de combustible en los nuevos modelos.

Esto último también se traduce en un alivio al bolsillo del consumidor, ya que los precios del carburante han aumentado de forma considerable en los últimos años, y el hecho de tener un motor eficiente, es un punto que toman muy en cuenta los nuevos compradores de coches.

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Piezas que integran al sistema de admisión

Filtro de aire: El aire se toma del exterior del vehículo y pasa por el filtro para evitar el ingreso de partículas que puedan contaminar la mezcla. Si esto sucede el rendimiento aumentará y el motor resultará menos eficiente.

Cuerpo de aceleración: Es el encargado de regular la cantidad de aire adecuada, que pasará por la válvula de mariposa hacia el colector de admisión.

Válvula de mariposa: Permite el acceso del aire, en función de las necesidades del motor, para enviarlo a los canales que se dirigen a la cámara de admisión. La válvula se colocará en cierto ángulo de apertura según la demanda del motor.

Colector de admisión: Es el encargado de distribuir la mezcla de aire y combustible de forma equitativa a cada uno de los cilindros del coche.

Si percibes que alguna de las piezas del sistema de admisión está fallando, te recomendamos agendar una revisión automotriz con nuestro equipo de mecánicos.

Sistemas de admisión según su tipo de colector

El colector de admisión uno de los componentes más importantes ya que se trata del ducto por el que pasará el aire después de pasar el filtro. Actualmente podemos encontrar dos tipos: el convencional y el variable, aunque estos últimos los más usados hoy en día.

Colector de admisión convencional

Este tipo de colectores fueron de los primeros en utilizarse en la industria y están equipados en modelos que funcionan con carburador o, que tienen un sistema de inyección monopunto, que abastece a todos los cilindros al mismo tiempo.

Con el colector convencional podemos lograr un par motor alto con a bajas revoluciones o una potencia elevada a altas RPM, pero no las dos cosas al mismo tiempo; son menos flexibles y su adaptación a los diferentes regímenes del motor es más baja.

Colector de admisión variable

Con la admisión variable se mejora la entrada de aire a los cilindros según el régimen de revoluciones al que esté funcionando el motor, así logra un torque alto y mejor potencia, adaptándose y aumentando sus prestaciones.

Los sistemas de admisión variable se montan en motores de cuatro válvulas por cilindro, que utilizan la inyección multipunto, es decir con un inyector por cilindro, y pueden clasificarse según la longitud del colector de admisión o por resonancia, abriendo por la vibración del aire.

Si tienes algún problema con el sistema de admisión de tu coche, te invitamos conocer más acerca de nuestros servicios de mecánica especializada.

Principales fallas que puede presentar el sistema de admisión

Como todo componente, el sistema podría presentar algún tipo de avería que se deba a un mal funcionamiento de las piezas o el desgaste de estas, de entre los que se pueden derivar los siguientes problemas:

• Pérdida de potencia o baja presión en el turbo
• Salida de humo negro por mala combustión
• Presencia de agua en el sistema de escape

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