Autolab / Mecánica General
7 June, 2022 - Tiempo promedio de lectura: 5 minutos.
7 June, 2022 - Lectura 3 minutos.
Autolab / Mecánica General
Cuando algo falla con nuestro auto, es importante poner atención a las señales que nos está dando para intentar identificar el origen del problema y cuál podría ser la posible solución. En caso de que no podamos dar con lo que causa la falla, siempre es importante visitar al mecánico, ya que, es muy probable que el daño sea más serio de lo que pensamos.
En muchas ocasiones ignoramos estas señales y lo que podría ser una reparación de rutina, podría volverse una costosa visita al taller y varios días sin tu automóvil. Una de las fallas que podría pasar “desapercibida” pero que podría causar problemas serios, es cuando la junta de la culata se queme e ignoramos las señales de que esto sucedió.
La junta de la culata se encuentra en el bloque del motor y la cabeza del motor y su principal función es la de sellar perfectamente la cámara de combustión para que el auto pueda generar la compresión necesaria y contenga los gases de escape.
Al ser una pieza que se encarga de sellar canales como el de refrigeración y el del aceite de motor, al tener una falla o quemarse, lo primero que ocasionará son fugas entre los componentes. Debes tomar en cuenta estas señales, las cuales serán un claro indicador de que algo está sucediendo mal con la junta de culata:
Este tipo de fallas son muy raras o muy poco frecuentes en autos nuevos o con pocos años, debido a que se trata de una falla de alto desgaste con el paso del tiempo.
La principal razón por la que puede quemarse la junta de la culata es debido a que este componente debe contener tanto los gases de combustión muy calientes a muy alta presión, así como el anticongelante que, si bien puede estar a temperatura ambiente, también puede estar a la temperatura de trabajo del motor.
Esto se debe al continuo cambio drástico de temperaturas extremas y las altas presiones, que la pieza llegue a desarrollar fugas con el tiempo.
Este tipo de falla sí nos permite seguir circulando nuestro auto, sin embargo, los principales síntomas de que la junta está quemada, podrían confundirse con algún otro fallo en el auto, esto ocasiona que pasemos de largo la posibilidad de que la falla sea ésta y por consecuente el daño sea más severo.
En el caso de que ignoremos la posibilidad de que las señales se deban a que la junta de la culata está quemada, estamos exponiendo a que el motor llegue a sufrir un sobrecalentamiento excesivo y llegue a “desvielarse”, una falla extrema que arruina el motor por completo sin posibilidad de repararse.
Este tipo de reparaciones no tienen un valor fijo, ya que dependen ciertos factores como el nivel de daño en la cabeza del motor, y del mismo modelo de auto. Por lo que será necesario cotizar de manera independiente. Es importante que nunca olvides que entre más tiempo dejemos pasar para reparar el daño, será más elevado el costo de la pieza y la reparación.
En Autolab encontrarás un equipo de profesionales dispuestos a atender las necesidades que llegue a tener tu coche. ¡Conócenos!