Autolab / Fallas
7 March, 2022 - Tiempo promedio de lectura: 5 minutos.
7 March, 2022 - Lectura 3 minutos.
Autolab / Fallas
Si un olor a gasolina aparece al interior de tu coche, no puede ser para nada un buen síntoma, ya que, el habitáculo suele estar muy bien aislado de la zona del motor, evitando en la medida de lo posible, el paso de ruidos y aromas.
Si esto ocurre, podría significar principalmente dos cosas: que el proceso de combustión no se esté llevando a cabo la forma correcta, o que existe una posible fuga de líquido combustible.
En estos casos, te recomendamos llevar tu coche al taller para una revisión automotriz, o una verificación vehicular con Autolab, ya que, de no atenderse, esto podría ser peligroso y ocasionar un accidente de mayor gravedad.
Si no se le da mantenimiento o está mal regulado, la suciedad se acumulará dentro del él. Esto hará que el aire que se mezcla con la gasolina no sea el suficiente. En caso de presentar este problema, bastará con llevar a cabo un servicio de limpieza.
Estas piezas se van deteriorando hasta desgastar las gomas o sellos, con esto la gasolina podría filtrarse y ocasionar el fuerte olor.
Los coches cuentan con un filtro de carbón activo encargado de disminuir los gases contaminantes que expulsan y reduciendo las emisiones contaminantes. En caso de que esta pieza esté rota o presente filtraciones, se ocasionará un fuerte aroma a gasolina y se encenderá el testigo de check engine en el tablero.
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Es una de las fallas que se presentan con mayor frecuencia, y esto podría deberse a que el tanque presenta roturas y el líquido se está fugando.
La forma más sencilla de identificar este síntoma es verificando si aparece una mancha de gasolina debajo del auto estacionado, misma que deberás limpiar de inmediato de ser el caso. Posteriormente, te recomendamos agendar una cita de servicio y llevar tu auto al taller para que el tanque sea reemplazado.
Es común que, debido a diversos factores como la ubicación, el uso, el calor, la suciedad, el nivel de desgaste, o una posible fractura ocasionada por una mala reparación, las mangueras que transportan el combustible se rompan y presenten fugas.
En este caso te recomendamos acudir con un experto a reemplazarlas y asegurarte de que el líquido de la fuga no esté rociando el escape o el motor, pues podría resultar peligroso.
Podría pasar que el despachador de la estación de servicio no cierre bien la tapa al llenar el tanque, o que la manguera del despachador derrame un poco de combustible al retirarla. Lo que ocasionaría que percibamos un olor intenso al carburante.
De no ser el caso, debemos revisar la tapa del depósito, ya que podría no estar en su lugar o estar rota, ocasionando que también percibamos este fuerte aroma.
Otro de los síntomas podría ocasionarse en el filtro del habitáculo, también conocido como filtro de polen, mismo que va directamente conectado con el sistema de aire acondicionado del coche o climatizador, según sea el caso.
Este sistema de filtración evita el paso de este olor al interior del coche, pero si se rompe o no está colocado de la forma correcta, el aroma podría colarse, siendo molesto para los ocupantes.
Lo primero que se debe hacer es rastrear la procedencia del aroma y absorber con una aspiradora o trapo los residuos que hayan quedado. Después se deberá quitar la suciedad con ayuda de una solución quita manchas, o en caso de no tener, hacer uso de agua y jabón.
En caso de que no haya signos de visibilidad, te recomendamos dejar puertas y ventanas abiertas para que el olor se vaya disipando poco a poco, sí como de reemplazar las piezas que podrían ocasionar que el líquido de combustión se esté filtrando.