Tiempo al ralentí: Impacto en el mantenimiento del vehículo

¿Cuando planificas tus mantenimientos, tomas en cuenta el tiempo promedio que tu vehículo pasa encendido, o solo te enfocas en su kilometraje?

El mantenimiento adecuado de un vehículo es esencial para garantizar su rendimiento a lo largo del tiempo. Uno de los aspectos más críticos del cuidado del automóvil es el cambio regular de aceite. Tradicionalmente, el cambio de aceite se ha basado principalmente en la distancia recorrida. Sin embargo, la creciente importancia de evaluar el tiempo de funcionamiento del motor, incluso cuando el vehículo está inactivo, ha llevado a una reconsideración de las prácticas convencionales de mantenimiento.

El Tiempo de Funcionamiento del Motor y su Relación con el Cambio de Aceite

A menudo, los conductores dejan el motor de sus vehículos en marcha mientras están estacionados, ya sea para mantener el confort interior, utilizar dispositivos electrónicos o simplemente por comodidad. Este tiempo de funcionamiento, aunque el vehículo no está en movimiento, tiene implicaciones directas en la vida útil del aceite del motor.

Cuando el motor está encendido, incluso sin mover el automóvil, se produce un desgaste gradual en las piezas internas del motor. Este desgaste puede generar contaminantes que afectan la calidad del aceite, disminuyendo su capacidad para lubricar eficientemente. Además, la exposición continua del aceite al calor del motor durante períodos prolongados puede acelerar su degradación química.

Calculando el Desgaste en Kilómetros Equivalentes

Aunque el vehículo esté inactivo, es posible estimar el desgaste del motor en términos de kilómetros equivalentes. La relación específica puede variar según el modelo y la marca del vehículo, pero se puede utilizar una aproximación general.

Estudios indican que, en promedio, una hora de funcionamiento del motor mientras está estacionado equivale a aproximadamente 25 a 30 kilómetros de conducción. Por lo tanto, si un conductor deja su vehículo encendido durante 10 horas, el desgaste del motor sería equivalente a haber recorrido entre 250 y 300 kilómetros.

Para mejorar la eficacia de tus mantenimientos preventivos, reduce el tiempo de encendido sin propósito de tus vehículos y anticipa el tiempo que permanecen activos sin recorrer kilómetros. Al minimizar el ralentí innecesario, maximizas la efectividad de tus intervalos de mantenimiento, asegurando un cuidado más preciso y eficiente de tus unidades.